La decisión política fue tomada a pesar de lo sugerido por el último cálculo del Precio de Paridad de Importación. Las autoridades apuntan que Ancap terminará el año con un resultado positivo.
Los precios de los combustibles y el peso “en el bolsillo” de la gente vuelven a estar en el centro del debate político, con cruces entre los dirigentes del gobierno y los del Frente Amplio.
El Poder Ejecutivo anunció ayer que no aumentará el precio de los combustibles en noviembre. La decisión política fue tomada a pesar de lo sugerido por el último cálculo del Precio de Paridad de Importación (PPI) que realiza la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea). Esa modalidad fue incluida por el oficialismo en la Ley de Urgente Consideración (LUC).
El anuncio desató el cruce de acusaciones entre oficialismo y oposición, con el referéndum contra la LUC de fondo. El Frente Amplio acusó al gobierno de no respetar la norma que sus jerarcas impulsaron, mientras que el oficialismo -en especial los blancos- argumentaron que la decisión responde a la buena gestión realizada en Ancap, generando ganancias que les permiten amortiguar una suba en el precio de las naftas, pese al aumento internacional del petróleo.
Este es el quinto mes que se aplica el sistema. En los primeros dos se aumentó. El tercer mes se definió una baja mínima, y en los últimos dos -cuando correspondía aumentarlos según el PPI- el gobierno tomó la decisión política de mantener los precios.
A partir del informe de la Ursea, el gobierno calculó que las tarifas al público deberían aumentar 3,8% ($ 2,69 por litro) para el caso de la nafta Súper 95 y 13,7% ($ 6,83 por litro) para el Gasoil 50S a partir del 1º de noviembre. Sin embargo, las autoridades del Ejecutivo decidieron no aplicar el aumento.
El ministro de Industria, Omar Paganini, declaró a Telemundo (Canal 12) que la decisión se adoptó teniendo en cuenta que “Ancap está obteniendo un resultado extraordinario muy marcado y muy sostenido en el tiempo, vinculado con la exhortación de energía eléctrica que hace UTE con gasoil de Ancap”.
¿Cuánto pierde Ancap por esta decisión política? El cálculo del ente es que ese “no ajuste” al alza en noviembre implica una pérdida de entre US$ 12 y US$ 15 millones. De todos modos, las autoridades entienden que terminarán con un resultado positivo a fin de año, por los resultados positivos que han acumulado.
Las ganancias a setiembre de las empresas vinculadas a Ancap ascendieron a US$ 90 millones. Por eso, incluso si se mantiene la tendencia al alza del precio del barril de crudo en estos niveles, la empresa petrolera estatal estima que no tendrá necesidad de caja hasta marzo de 2022, estimó el vicepresidente de Ancap, Diego Durand.
Ayer los dirigentes frenteamplistas salieron a la opinión pública a criticar al gobierno, en el entendido de que no está cumpliendo con la norma que impulsó.
“El gobierno realmente está preocupado con el referéndum. Hasta llegan a esto!! Pero la gente no es tonta y no la van a engañar con estos artilugios oportunistas. Una muestra más de que la LUC tiene 135 artículos negativos y antipopulares”, escribió en Twitter el senador y exministro de Economía Mario Bergara.
“Si será malo el mecanismo establecido en la LUC: para defenderlo, la mejor estrategia es no aplicarlo para que no se vea que sus efecto son muy malos. Mal diseño, peor aplicación. Poco serio”, sumó el exviceministro de Economía Pablo Ferreri.
El vicepresidente de Ancap, Diego Durand, defendió la decisión del gobierno remarcando que lo determinado en la LUC referido a combustibles sigue vigente y “para nada pretende tomarse una decisión arbitraria”. “Antes bajaba el crudo y los precios se mantenían, hasta subían para hacer caja. Hoy la caja la tiene a la vista la ciudadanía y si es buena se vuelca a los dueños de la empresa pública, que es la gente”, dijo en conversación con El País.
Durand insistió en que la “no suba” se pudo definir por la “buena gestión” que llevó a tener ganancias por US$ 90 millones en setiembre. “La LUC nada dice de resultados (de Ancap). Donde la ley nada dice, por tanto, está permitido. Sí hay un beneficio que logra la empresa de una buena gestión y se busca que eso llegue al consumidor final”, dijo y manifestó sorpresa de que la discusión se dé ante una definición de no aumento de precios, y no se debata la eficiencia “extraordinaria” que reflejó la empresa petrolera.
https://www.elpais.com.uy/informacion/politica/subir-combustibles-implica-perdida-us-millones.html