Cuando se dibuja el día, asomamos a esas intenciones hechas anuncios que revelan todo lo bueno que se viene realizando en el mandato de la actual administración departamental.
Casi siempre encontramos una meta trazada, un plan en marcha y un método para cumplir con las expectativas.
Si algo recordaremos cuando expire éste tiempo, será la incansable dinámica de construir y forjar a diario del actual equipo de gobierno; desde todos los lugares posibles, con el temple justo para avanzar sin estridencias buscando engrosar la calidad de vida de familias salteñas.
Las buenas noticias estimulan y animan. A quienes las provocan y a la población en su conjunto claro está.
Ya resulta de largo aliento, el engrose de la flota vehicular de la Intendencia de Salto. Paulatinamente y en forma gradual; conocemos de incorporaciones a la infraestructura.
Han arribado a nuestra ciudad, provenientes de Montevideo, seis nuevos camiones marca Volkswagen, volcadores todos, de gran capacidad de carga, que cumplirán tareas en parques y jardines así como en recolección y barrido.
Mejores condiciones para trabajar, más comodidad y eficiencia en el devenir de las labores y confiabilidad hacia el funcionariado en quien se sigue pensando en grande.
El principio del día va alcanzando esa profundidad sin medida. Un remanso silencioso y lleno de calma nos agudiza sentidos en otro punto de cambios y remodelación.
Es que en la esquina de calles Agraciada y Joaquín Suárez se sigue cambiando. A la plazoleta del Acordeón, con su acondicionamiento parquizado, iluminación, bancos y masetas, eliminación del cruce de vías férreas sobre la calzada; ahora se le adhiere una novedad.
Acaban de quedar finalizados los badenes sobre la vereda este, obra en hormigón que conlleva a una mejor canalización de las aguas pluviales y de las enchorradas.
Cabe acotar, que una empresa privada del medio, se ocupará del mantenimiento y conservación. Experiencia de inserción social positiva que se reitera en otros cónclaves de recuperación de espacios públicos.
Ese cruce de caminos, era un lugar inhóspito y hasta incómodo de atravesar. Hoy en día, se ha transformado en un ambiente acogedor y digno de reparo y descanso.
El día ofrece esa pintura que logra pintar un venturoso tiempo. Resulta incesante el trabajo de OSE, sobre calles Juan Carlos Gómez entre Artigas y Varela.
La instalación de los colectores que conectarán con la planta de tratamiento de efluentes en zona sur; provocan algunos percances en la circulación de los vehículos que muy pronto dejarán paso a una obra de magnitud conjunta entre el organismo nacional y la comuna.
Al final que sigue siendo el principio, es cuando el día galopa hacia más fe y esperanza. Allí, observamos los trabajos de arreglo sobre el casco céntrico. El hormigonado de calle Brasil se viene recuperando.
Las reparaciones se extienden en la distancia y no acaban las buenas nuevas. Nunca han terminado. Y el gobierno de Salto, no cesa en su ímpetu de seguir dibujando cada día.