La implementación efectiva de esta nueva tecnología esperan sirva para incrementar el uso de medidas alternativas a la prisión por parte de la Justicia.
A partir de marzo de este año, la Policía utilizará una aplicación para el control de las personas que estén con prisión o arresto domiciliario. Se trata de una tecnología de reconocimiento biométrico en la que las personas deberán reportarse varias veces al día, donde se corrobora su ubicación.
Cuando la Justicia define prisión o arresto domiciliario, en la actualidad hay dos modalidades de control: el uso de la tobillera electrónica y la corroboración presencial mediante visita policial.
Pero desde marzo la Dirección Nacional de Medidas Alternativas sumará una nueva modalidad a través de una aplicación.
“Se va a utilizar una tecnología biométrica que trabajará con reconocimiento facial, como la utilizada en aeropuertos y otras unidades policiales. Va a trabajar con control biométrico y con ubicación a distancia por GPS”, explicó Fabián Rosano, Dirección Nacional de Medidas Alternativas.
La persona que esté en control por esta modalidad recibirá un celular con la aplicación, que le notificará de demandas de prueba de presencia mediante imágenes biométricas de reconocimiento facial con cruzamiento de localización. Si la persona no responde al primer llamado de la app, se repite la demanda a los dos minutos; y en caso de no responder, se detona una alarma que envía personal policial.
“Esto viene a complementar y a ser el punto medio entre los controles a los domicilios de las personas a las que se les dispone prisión domiciliaria sin tobillera y aquel control que realizamos desde el centro de monitoreo a los con tobillera. Esta app viene a estar en el medio de eso”, apuntó Rosano.
La implementación efectiva de esta nueva tecnología esperan sirva para incrementar el uso de medidas alternativas a la prisión por parte de la Justicia.
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