La estrechez del desarrollo alcanza su épico despliegue cuando las vías de comunicación adquieren una importante mejora al ser acondicionadas, mejoradas y en diversos tramos, recuperados a nuevo.
En éste período de cuatro años y tres meses ya, el Gobierno Nacional de la fuerza política ha realizado significativas inversiones de desarrollo carretero. Las imágenes provocan satisfacción por la población del país, hay otras oportunidades, se respira otro aire, la vida se torna más y mejor en distintos puntos del territorio.
En breve, vendrán instantes sublimes de reflexión para cada persona respecto al destino administrativo de Uruguay. La decisión acerca de nuestros próximos gobernantes, trae consigo evaluar y mirar alrededor. La población uruguaya se ha superado de manera innegable siendo protagonista de un programa gubernamental que presenta concreciones y proyecta otras.
El arreglo de rutas nacionales de gran significación, la construcción de puentes, la reactivación del ferrocarril, la instalación de nuevas industrias y confirmaciones para Salto, como ser, la central hortícola con licitación en transcurso y la instalación de la empresa Teslights; son algunos logros trascendentes.
Hace unos meses se inauguraba, muy cerca de la ciudad de Artigas, la ruta nacional número 30 con un recorrido cercano a los 230 kilómetros y 4 puentes hechos a nuevo.
En dicha ocasión, el ministro de Transporte y Obras Públicas deslizó un dato interesante: al finalizar el actual mandato presidencial se habrán recuperado y mejorado unos 3.000 kilómetros de rutas nacionales. Hacia fines de julio de 2019, se inaugurarán las reparaciones de la ruta n º 26 en un recorrido de 200 kilómetros, con tramos de nueva iluminación en los accesos a la ciudad de Tacuarembó. Aquí en nuestra ciudad, con la participación de la OPP (Oficina de Planeamiento y Presupuesto), se han hecho inversiones en hormigón y carpeta asfáltica de gran magnitud a lo cual hay que agregar la permanente actividad de mantenimiento de nuestra caminería rural.
Se viene cumpliendo a razón de 1.000 kilómetros recuperados anualmente con intervención de algunas empresas privadas. La ciudad de Salto y el Departamento se han transformado como hacía mucho tiempo no ocurría. Y esto es calidad de vida robustecida, mejoras en interés general y colectivo.
Avenidas como Luis Batlle Berres o Apolón de Mirbeck ponen a Salto en otro sitial de jerarquía. Y en éste mandato, con éste gobierno nacional. La Avenida Reyles divisa la meta de la concreción y la Avenida Manuel Oribe se apronta a corregir los desaguisados del pasado abismo. La comunidad salteña lo tiene muy bien asumido. Lo constatamos diariamente.
El regreso del ferrocarril en su versión tres décadas después del cierre, proyecta un futuro promisorio y de envergadura. Ya se hicieron a nuevo unos 300 kilómetros de vías férreas desde Paso de los Toros hasta Rivera y se apresta la concreción desde Paso de los Toros hasta la capital del país.
La multinacional UPM ha generado un reverdecer de un medio de transporte adherido a la identidad nacional. El ramal desde el poblado de Algorta en Río Negro hasta la ciudad de Paysandú avanza.
El puerto de barcazas, próximo a Corralito trae aparejado la mejora de las vías del ferrocarril por estos lares y ello motiva a seguir confiando en ésta fuerza política.
Grandes sueños dejaron de ser para vivivenciar un Uruguay nuevo, pero con aquellos principios.
