De lo que no existe duda alguna, es de la decisión convertida en accionar constante en seguir trabajando en una de las demandas principales para la actual administración: la reparación de Salto impulsada desde sus calles y vías circulatorias.
Nunca ha dejado de ser una de las aristas trascendentales para el equipo de gobierno de Salto: reparar calles y avenidas de nuestra ciudad.
Sabedor, el gobierno salteño, de que falta todavía en una ciudad que ha crecido en forma inimaginable. Tranquilo a la vez, porque mucho se ha hecho en algo más de tres años de mandato. Sin dejarse estar y consciente de la imperiosa respuesta brindada a la población, la Dirección General de Obras de la comuna multiplica intervenciones en distintos puntos estratégicos.
La variable que no ha cambiado cada vez que se llega al lugar para empezar reparar o acondicionar; es el anuncio de la ciudadanía: hacía mucho que no se atendía la calle y esa sensación de sentirse abandonados por años.
Hoy, referiremos a un enorme trabajo que invade la calle Rincón en proximidades al campo deportivo del club River Plate.
El desembarco de la maquinaria de la Intendencia es considerable, para una tarea de bacheo prolijo buscando garantizar un tránsito vehicular más seguro y óptimo.
Los funcionarios apostados en esa zona sur, en pleno Salto Nuevo, abordarán además la limpieza de los canales de desagüe del agua para que ésta fluya sin obstáculos y evitar así los sucesivos embates de las enchorradas.
Basta recordar además que, muy cerquita del cónclave que hoy referimos, se trabajó sobre la Avenida Solari con tareas reparatorias de calzada, la mismísima calle Orestes Lanza algo más hacia el oeste.
La planificación no cesa y son varias cuadrillas dispersas por varios barrios, trabajando diariamente.
Ahora con el impulso renovador de contar con nueva maquinaria vial, gracias al esfuerzo de la comuna en conjunto con la contribución de toda la ciudadanía; así como la vital compenetración del gobierno nacional.
El tiempo alcanzará la evaluación final y hasta donde se podrá avanzar. De lo que no existen dudas es del compromiso manifiesto por mejorar y por generar más calidad de vida ciudadana.
En el tramo final de octubre, se retoma la ejecución del programa de gestión subnacional (PDGS); arreglo de calles, cordón cuneta, pluviales en lo que toca al espacio de hoy.
Pueblo Belén, en el noroeste de la ciudad, se apresta a recibir al personal de la Intendencia para trabajar sobre el arreglo de unas diez calles aproximadamente.
En ellas se colocará bitumen permitiendo un robustecimiento y una optimización en calidad que asegure el porvenir. Ya lo expresó el jefe comunal hace algunos días… ”pretendemos seguir llegando a barrios que habían sido olvidados, queremos seguir cumpliendo con el plan y de a poco lo iremos logrando”…
Tanto esfuerzo encuentra ese reconocimiento tan estimulante y no hace otra cosa que seguir a fondo. El bienestar de las personas, no mide intensidades.
